Palabras de bienvenida

¡Hola! Mi nombre es Paquita Garrido y vivo en un pueblo maravilloso del Parque Natural de la Sierra de Cazorla, Segura y Las Villas, concretamente en Villanueva del Arzobispo (Jaén-España). Quiero compartir a través de este blog una serie de experiencias, inquietudes que he vivido a lo largo de mi vida. Son temas muy variados que iré publicando poco a poco. Espero que te gusten tanto como a mí.

Recibe un cordial saludo, Paquita

domingo, 3 de abril de 2011

Sobre los hijos

Una cosa te voy a decir: Ora. Siempre que puedas, busca siempre un rato para la oración. Eso me agrada mucho y siempre que lo hagas, que te salga del alma; tienes que estar en contacto conmigo, porque más valen corazones próximos que casas carcomidas, porque quiero que sepas que sólo existe un sufrimiento, el de estar solos. Ten amigos, relaciónate; eso sólo se consigue midiendo a todos con la misma vara, o sea, tratando a todos los seres humanos con mucho cariño y sinceridad. No olvides que debes siempre de tratar a los demás como tú quieres que te traten a ti. Acércate siempre a quien más lo necesite, no le niegues nunca tu amistad al humilde, ni al enfermo, piensa que donde más     miseria haya, allí estaré Yo y si te acercas a dar amor, si  es que no tienes otra cosa que dar, cuando te retires de allí sentirás en tu alma un gozo tan grande que a la vez, te enriquecerás como ser humano. Piensa, piensa que si te enriqueces haciendo toda tu vida el bien, ese tesoro es el único que ni la muerte lo puede destruir” (Dios)
Estoy muy contenta de poder hablar contigo y muy agradecida de ver con qué atención me lees. Eran tantas las ganas que tenía de hablarte que una vez que me he puesto a hacerlo, todos los consejos que te doy, me parecen pocos. Aquí tienes algunos:


Sobre los hijos:


Si tienes hijos, edúcalos, Cuenta con ellos para todo desde pequeños; que sepan dónde está todo en  la casa. Si hay mucho dinero, díselo y enséñales a compartir, y  diles que no por tener mucho se es más rico. Enséñales a que no le tomen cariño  a lo material, para que, si vienen tiempos peores, sepan adaptarse a las circunstancias y si en tu casa no hay en abundancia, también que lo sepan. Una familia tiene que ser como una piña: juntos para todo. Enséñales a trabajar, no les des el pez para que coman, dales una caña para que pesquen. Procura ser un amigo para tu hijos, que te respeten, pero que no te teman. Y a tus padres mayores procura darles un rincón en tu casa. Si quieres puedes. Una persona mayor en una casa es una buena enseñanza para tus hijos. Piensa que tus padres te quieren mucho y si tú te pones mala y necesitas un transplante, por muy ancianas que sea, lo harían.




No hay comentarios:

Publicar un comentario